La cosecha final de cereales subirá ligeramente en Andalucía pese a la importante merma a nivel nacional

Pese al descenso de más del 20% en la cosecha de cereales anunciado a nivel nacional, Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía subraya el buen desarrollo de la campaña en la región, donde se prevé una producción de 2.310.185 toneladas, un 2% superior a la de 2013. Este dato supone una diferencia del 33% con respecto a 2011 y de hasta el 98% en relación a la campaña 2012.

Por cultivos, cabe destacar que el trigo blando superará al duro en cantidad y se convertirá en el primer cereal andaluz, aunque el trigo duro mantendrá su relevancia económica y relativa a nivel nacional, pues Andalucía continuará siendo la primera región productora a larga distancia de Aragón, siguiente comunidad en importancia.

Concretamente, mientras el trigo blando incrementará su producción un 17% con respecto a 2013, hasta las 645.250 toneladas, el trigo duro la reducirá en un 14%, quedándose en 547.448. Les seguirán en cantidad el maíz, con 364.504 toneladas (-17%); la cebada, con 355.146 toneladas (+1%), y el triticale, que experimentará una subida considerable de más del 60% hasta las 244.460 toneladas. La avena, con 148.113 toneladas (+18%), y el centeno, con 5.256 (+238%), cierran la lista de cultivos.

Los buenos datos de campaña en Andalucía se deben por un lado, al incremento de un 6% en la superficie sembrada, hasta las 674.522 hectáreas, y, por otro, al buen desarrollo de las condiciones meteorológicas en la región, aunque el rendimiento ha sido algo inferior al de 2013 debido, fundamentalmente, a las altas temperaturas del mes de mayo.

Con todo, Andalucía recogerá algo más del 12% de toda la cosecha española, superando el 9,36% del año anterior, aunque se mantendrá como cuarta comunidad autónoma por producción, tras Castilla y León (32,73%), Castilla-La Mancha (15,72%) y Aragón (13,94%), según el aforo realizado por Cooperativas Agro-alimentarias de España.

En cuanto a la calidad de la cosecha andaluza, será en general bastante buena, con altos niveles de proteínas aunque, en algunos casos, bajo peso específico. De las dos principales especies, trigo blando y trigo duro, la que está registrando mayores niveles cualitativos, es el trigo duro, que se está clasificando mayoritariamente como Grupo 1, el más apreciado por la industria semolera y pastera.