Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía continúa con la formación a mujeres cooperativistas para fomentar su promoción profesional

Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía continúa con la formación a mujeres cooperativistas para fomentar su promoción profesional

Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía continúa con sus actividades de formación a mujeres agricultoras y ganaderas cuyo objetivo es facilitar su acceso a los órganos de gestión de las cooperativas. Lo hace gracias a una nueva edición del curso de ‘Desarrollo personal y gestión’, organizado por la federación de cooperativas andaluza y Fundación ‘la Caixa’, a través de CaixaBank y de su línea de negocio AgroBank. Se celebra desde hoy y hasta el próximo 12 de noviembre en Carcabuey, Córdoba.

El programa formativo, que se ha inaugurado esta tarde, se incluye dentro de un convenio entre Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía y Fundación ‘la Caixa’ gracias al que se trabaja para incrementar la promoción profesional de las mujeres cooperativistas a través de la formación. Se trata del tercero de los seminarios que se organizan en esta línea, tras las ediciones de El Ejido (Almería) y Antequera (Málaga).

El comienzo del curso, al que asisten una treintena de mujeres cooperativistas, la mayoría socias de la cooperativa Almazaras de la Subbética, de Carcabuey, ha contado con la presencia del gerente de Cooperativas Agro-alimentarias de Córdoba, Joaquín García Fernández de Villavicencio, y la directora técnica y responsable de Igualdad de Almazaras de la Subbética, Nuria Yáñez González. Por parte de CaixaBank han participado Pascual Berchez Toro, responsable de AgroBank en la Dirección Territorial de Andalucía Oriental, y Salvador Aguilar Carmona, referente agro de CaixaBank en Córdoba Provincia Sur.

El seminario se celebrará hoy y durante otras tres sesiones que tendrán lugar los días 5, 11 y 12 de noviembre en el salón de usos múltiples del Ayuntamiento de Carcabuey. Las jornadas, de cuatro horas de duración cada una, versarán sobre habilidades personales, marco económico y financiero, marco jurídico y recursos humanos, y comunicación digital.

Joaquín García Fernández de Villavicencio, gerente de Cooperativas Agro-alimentarias de Córdoba, ha destacado que “la formación es un excelente acicate para impulsar a las mujeres dentro de los órganos de decisión de las cooperativas agroalimentarias andaluzas”. Así, agradece su apoyo a Fundación ‘la Caixa’ y confía en seguir realizando este tipo de actividades, que se combinan con una fuerte apuesta de la federación por fomentar la promoción profesional de la mujer en el sector primario y en el seno de las cooperativas.

El responsable de AgroBank, Pascual Berchez Toro, ha puesto en valor el compromiso de CaixaBank y de AgroBank con Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía en el fomento de la diversidad en el sector “y en la promoción de la mujer en el agro español, tal y como demuestran proyectos como este seminario. Este respaldo a la diversidad es prioritario porque conforma, además, una de las principales líneas de nuestro Plan Estratégico”, ha explicado.

El acuerdo de Fundación “la Caixa” con Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía a través de AgroBank responde a la estrecha relación entre ambas entidades, que trabajan juntas con el objetivo de apoyar y fomentar el desarrollo del sector agroalimentario.

Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía reafirma su compromiso con la sostenibilidad al unirse al Pacto Mundial de la ONU

Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía reafirma su compromiso con la sostenibilidad al unirse al Pacto Mundial de la ONU

Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, federación que representa a la economía social agraria andaluza, se ha unido recientemente al Pacto Mundial de las Nacionales Unidas. La organización que aglutina a 659 cooperativas agroalimentarias y a más de 291.000 personas dedicadas a la agricultura y la ganadería reafirma así su compromiso con la sostenibilidad y da un paso más en su política de Responsabilidad Social Corporativa (RSC), al sumarse a miles de empresas de todo el mundo con el compromiso de realizar acciones empresariales y corporativas responsables.

La adhesión al Pacto Mundial implica que Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía se compromete a alinear su estrategia con los Diez Principios universalmente aceptados en las áreas de derechos humanos, normas laborales, medio ambiente y lucha contra la corrupción. Además, la federación seguirá trabajando en la adopción de medidas en apoyo de los objetivos de las Naciones Unidas plasmados, actualmente, en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

Como explica el presidente de Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, Juan Rafael Leal Rubio, “la federación, al igual que sus empresas asociadas y las miles de personas que las conforman, se significan con valores como la democracia, la igualdad o la equidad, afines todos ellos a los principios promulgados por la ONU”. Por este motivo, “la federación se compromete a involucrarse con el Pacto Mundial de las Naciones Unidas a través de diferentes acciones y proyectos que impulsen un modelo agroalimentario y una economía social más sostenibles en materia económica, social y medioambiental”, recalca el máximo representante del cooperativismo andaluz.

Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía trabaja desde hace 25 años por potenciar la competitividad del cooperativismo agroalimentario, favorecer el desarrollo sostenible del entorno rural y defender el peso económico y social de la agricultura y la ganadería andaluzas. Fruto de este esfuerzo, las cooperativas agroalimentarias de Andalucía han mostrado su potencial en los momentos más críticos tanto de la crisis económica como de la sanitaria, en la que ha demostrado su fortaleza y responsabilidad con la sociedad y con una alimentación segura y de calidad.

En este sentido, las 659 cooperativas agroalimentarias generaron en 2020 una riqueza de 9.440 millones de euros, lo que supone más del 5% del PIB andaluz, que se concentra en el medio rural. Además, emplearon de forma directa a 36.000 personas y sostuvieron indirectamente otros tantos miles de trabajos en empresas auxiliares ligadas a su actividad.

Para poder alcanzar estos objetivos, la organización ha trabajado conjuntamente con sus cooperativas asociadas, así como con entidades públicas y privadas (universidades y centros de I+D+i), para promover numerosos proyectos de innovación que han contribuido y contribuyen a construir una agricultura y una ganadería sostenible y competitiva.

Tras comprobar los beneficios de estas alianzas público-privadas, la federación apuesta por seguir impulsando proyectos de esta índole para dar soluciones a los desafíos detectados por el sector agroalimentario, principalmente como consecuencia del cambio climático. De esta manera, Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía ofrece a sus empresas y al sector herramientas que faciliten el desarrollo de una actividad agroalimentaria competitiva, respetuosa con el medio ambiente y que garantice el abastecimiento de alimentos sanos, seguros y de calidad.

Igualmente, la federación vela por eliminar cualquier discriminación en materia laboral, tal y como recogen los principios de las Naciones Unidas. En este sentido, ha incorporado a su cultura corporativa medidas en pro de la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres y a favor del relevo generacional con el objetivo de cultivar un modelo empresarial más plural e igualitario.

Además de adherirse como entidad, Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía se compromete a trabajar directamente con sus más de 650 empresas asociadas con el fin de que adquieran su compromiso público con el Pacto Mundial y los Objetivos de Desarrollo Sostenible, ya que de forma innata muchas de ellas cumplen con la mayoría de los 17 objetivos planteados por las Naciones Unidas.

¿Qué es el Pacto Mundial?

En el año 2000, Naciones Unidas lanzaba el Pacto Mundial, la mayor iniciativa de sostenibilidad corporativa del mundo, que se sustenta en Diez Principios universalmente reconocidos en materia de derechos humanos, trabajo, medio ambiente y anticorrupción. Al incorporar este decálogo a sus estrategias, políticas y procedimientos, las empresas no sólo cumplen con sus responsabilidades básicas para con las personas y el planeta, sino que también preparan el escenario para el éxito a largo plazo.

El Pacto Mundial de Naciones Unidas cuenta en la actualidad con más de 18.760 entidades de más de 160 países, de las que 2.070 pertenecen a la Red Española, lo que la convierte en la Red Local más importante del mundo por número de adhesiones, así como por sus numerosos informes de progreso y memorias de sostenibilidad presentadas, en desempeño y soluciones para sus socios.

El sector agrario lamenta el menosprecio de Luis Planas al campo andaluz al avanzar con su Plan Estratégico

El sector agrario lamenta el menosprecio de Luis Planas al campo andaluz al avanzar con su Plan Estratégico

El sector agrario andaluz, representado por ASAJA, COAG, UPA y Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, muestra su decepción, desesperación y enfado tras la celebración ayer de la Conferencia Sectorial de Agricultura, en la que el ministro de Agricultura, Luis Planas, ha dejado claro que las demandas de los agricultores y ganaderos andaluces no tienen cabida en su plan para la PAC.

Lejos de abrir la puerta al consenso, Planas ha dado una patada hacia adelante y anunció ayer que el borrador del Plan Estratégico se someterá a un proceso de consulta pública a finales de noviembre, cuando el documento no está consensuado y es rechazado por Andalucía, entre otras regiones. El ministro desoye de nuevo a los productores andaluces y declina incorporar medidas que puedan paliar el grave perjuicio que su propuesta de Plan Estratégico para la aplicación de la PAC va a generar en Andalucía, con pérdidas de hasta 180 millones de euros anuales. Es decir, si no se modifica la propuesta, la comunidad podría perder hasta 900 millones entre 2023 y 2027. Por ello, para las organizaciones agrarias y cooperativas, la consulta pública es una artimaña para justificar que se han ignorado las propuestas que se han hecho en las mesas de negociación, dando la espalda al sector agrario y pretendiendo otorgar un valor democrático a una propuesta que no lo tiene.

Con el anuncio de ayer, Luis Planas da otro paso con su propuesta sin atender las demandas del sector agrario andaluz y traiciona a Andalucía una vez más al avanzar con un modelo que provocará un trasvase de fondos que perjudicará de forma directa a los agricultores y ganaderos que más han aportado al presupuesto de la PAC para España, reflejo del potencial productivo del campo andaluz. De esta forma, el ministro niega el derecho al progreso y al futuro de los productores agrarios andaluces. Cabe recordar que el complejo agroalimentario es un motor socioeconómico fundamental para la región, que dinamiza el medio rural, genera más del 10% del empleo de la región y supera los 30.000 millones de euros de negocio. Se trata de un modelo sostenible y social que distribuye riqueza, genera empleo, gestiona territorio y fija población.

El Plan Estratégico Nacional de la PAC tiene que ser fruto del consenso y no una imposición ni una mera herramienta especulativa, y debe reconocer la colaboración y el reconocimiento del peso estratégico que tiene Andalucía, contemplando la realidad agraria de esta región y no mermando la rentabilidad del campo andaluz, que ya de por sí está comprometida por unos costes cada vez más elevados, por unos precios que merman la viabilidad y que, de persistir el planteamiento, dejaría a los agricultores y ganaderos andaluces fuera del proyecto medioambiental de la Unión Europea.

Propuestas sobre los ecoesquemas

Los ecoesquemas se nutren del 25% del total de las ayudas directas que reciben los agricultores y ganaderos. Por ello, las organizaciones agrarias y cooperativas entienden que lo razonable es aplicar los ecoesquemas en función de la región productiva en la que estén esos agricultores y ganaderos. Es decir, cada región debe compensar la medida que se ha de aplicar en el ecoesquema, por lo tanto ese presupuesto retornaría para que no lo perdieran de manera injusta agricultores y ganaderos, reconociéndose así la diversidad productiva de nuestro país.

Se evitaría de esta manera la especulación presupuestaria y fijaría el presupuesto al territorio, contemplando la diversidad productiva y apostando por el modelo social y profesional de agricultura. De no ser así, se deslocalizan los fondos presupuestarios y se pondría en juego el marco de calidad, competitividad y seguridad alimentarias que caracteriza hoy en día al sector agrario andaluz.

Por otro lado, organizaciones agrarias y cooperativas insisten en que la reducción de regiones productivas penaliza la diversidad de Andalucía, al pasar de las 50 zonas actuales a un máximo de 20. Si bien el panorama planteado en los primeros borradores era menos halagüeño para la comunidad, una vez conocido el planteamiento de la distribución comarcal de cada una de ellas, así como los importes medios, las organizaciones representativas del sector agrario andaluz exigen cambios sustanciales para conseguir el necesario equilibrio territorial y productivo con tal de minimizar el impacto real y las pérdidas que de estas nuevas regiones se derivarían para miles de agricultores y ganaderos andaluces.

La propuesta del campo andaluz está encima de la mesa y se espera que el ministro de Agricultura reconduzca su actitud. Mientras, el sector se reunirá en los próximos días para organizar un proceso reivindicativo más contundente con el objetivo de alcanzar un trato equilibrado para Andalucía.